El legado del marqués.

Antonio Raimundo Ibáñez, nació en 1779 en Santa Eulalia de Oscos. Hijo de padres hidalgos no se conformó con un cómodo empleo de administrador. Tenía talento y ambición.

Presa de Sargadelos, desbordada por la crecida del río Xunco.

Labrada su propia fortuna consiguió el favor Real para montar su industria. En Cervo disponía del carbón vegetal de sus fragas, hierros en sus yacimientos, caolín y feldespatos en las canteras, y carpinterías de ribera en San Ciprián para la construcción de buques. También el agua para mover los molinos y refrigerar sus hornos. 

Adelantado a su tiempo, fue acusado y linchado por afrancesado por los envidiosos caciques y eclesiásticos que aún vivían en época feudal.

Nota:

Esta fotografía forma parte de la exposición fotográfica Rincones de la Mariña (Recunchos da Mariña).